El siguiente contenido fue elaborado y difundido por la web platense RealPolitik:
Paulatinamente los verdaderos motivos del asalto a la casa que el jefe comunal de La Plata, Julio Garro, tiene en el country Grand Bell, comienzan a salir a la luz. A días del hecho, los interrogantes y las pruebas van tomando forma y no hacen más que comprometer profundamente al intendente macrista.
En artículos anteriores hicimos mención a los trascendidos en torno a supuestos retornos en los acuerdos firmados entre el municipio y las líneas de colectivos y la empresa ESUR, por la privatización del servicio de recolección de residuos.
También hablamos de la desaparición de al menos un sospechoso “maletín” de la casa de Garro, a lo que ahora se suman algunos trascendidos judiciales en torno a las capturas registradas por las filmaciones del country, en donde se vería al detenido Patricio Miguel Másana -el mismo que tenía bajo su control las horas cores y polad de la Policía Local evidenciando un vínculo con la gestión municipal- portando varios “portafolios” negros.
Las incógnitas hoy por hoy son varias, aunque prometen ser más:
> ¿Por qué Másana había elegido alquilar una casa en el Grand Bell poco tiempo antes del hecho?
> ¿Alguien le vendió alguna información?
> ¿Por qué un ladrón pagaría 40 mil pesos de alquiler durante varios meses, como estrategia para robarse 25 mil pesos y algunas joyas?
> ¿Qué lleva a correr un riesgo tan grande, sabiendo de la obvia existencia de cámaras dentro del barrio cerrado y la dimensión que tomaría el caso?
> ¿Por qué pensar que un delincuente podría gozar de tanta impunidad?
> ¿Qué tan estrecho es el vínculo que mantiene Másana con el secretario de Seguridad de la municipalidad de La Plata, Daniel Pique, de quien fuera subalterno entre los años 2010 y 2011?.
> Y por último: ¿Por qué Garro no quiere mostrar las capturas lo de ocurrido durante aquella mañana, tal como bien hizo Sergio Massa en su momento para despegarse del caso que sufrió en su vivienda en Tigre?
Este medio pudo recabar más información sobre el hecho, lo que no hace más que coadyuvar en poner en tela de juicio el papel del mandatario municipal y el verdadero motivo de este violento asalto.
Según supo RealPolitik en exclusiva, en un giro inesperado, Másana decidió cambiar de defensor. Su nuevo representante es nada más y nada menos que Alejandro Montone, quien más allá de haber sido procesado y embargado por el juez federal Claudio Bonadío tras intentar obtener miles de dólares o la entrega de una quinta a cambio de la libertad de un detenido con 30 kilos de marihuana, posee una polémica trayectoria como abogado.
Estrategia 1 (en contra de Garro)
“Garro le tiene miedo a Montone”, es la frase que suele escucharse entre las reuniones más privadas de la mesa chica del garrismo. Y no es para menos. Montone es el abogado que evidenció el torpísimo proceder de la gestión municipal cuando, tras el allanamiento a un galpón que contenía materiales de cooperativistas, se secuestraron bienes que finalmente resultaron no ser propiedad del estado comunal. La denuncia penal del intendente Julio Garro fue otro papelón y Montone fue clave para hacerlo quedar en evidencia.
La nueva denuncia de Garro en el marco del asalto a su casa, no habría servido más que para ponerlo entre la espada y la pared. Por lo tanto, la estrategia del defendido sería simple: Montone pedirá las cámaras en las que se vería a Másana portando varios maletines de dinero. Si Garro mantiene la idea de confrontar, entonces, se iría más allá y se comenzaría a pedir explicaciones de los supuestos fondos.
Estrategia 2 (a favor de Garro)
Montone puede ser el verdugo pero también el salvador del jefe comunal que responde a Mauricio Macri. Es que el abogado también fue y es el defensor de Juan Pablo “Papupa” Córdoba, socio territorial de Garro que estuvo detenido por el triple crimen de los policías ocurrido en octubre de 2007. El profesional de las leyes es recordado por haber sido uno de los cerebros detrás de la famosa cámara oculta en la que se ve al ex policía Marcos Casetti contar en primera persona cómo, supuestamente él junto a Mariano Ezequiel Filippi Medina y el prófugo Fernando Darío Maciel, habían sido quienes masacraron a Alejandro Vatalaro, Pedro Díaz y Ricardo Torres Barboza.
Pero como si eso fuera poco, Montone es además defensor del empresario Santiago Piedrabuena, otro socio de la noche del intendente Garro, procesado por la muerte de Yésica Uscamayta en la fiesta clandestina de Melchor Romero, donde se denunciaron pagos de coimas a Control Urbano que sacaron a relucir una red de corrupción y connivencia de dimensiones inimaginables entre el negocio de la noche y el gobierno comunal.
La pregunta obvia es por qué Másana elegiría ser defendido por un abogado que también mantiene una “amistad” con algunos integrantes de la casa. Probablemente, más temprano que tarde, el tiempo nos permitirá conocer los motivos.
Dacal
El polémico asalto generó esquirlas y consecuencias de todo tipo. Una víctima inesperada es Alberto Dacal, uno de los grandes empresarios que controla el negocio de los bienes raíces en la ciudad de La Plata.
El motivo es que el policía detenido Patricio Miguel Másana habría contratado el alquiler de su casa en el country bajo esta inmobiliaria, que, dicho sea de paso, es conocida en el ambiente por “bancar” las campañas políticas de los más diversos candidatos y partidos.
En el contrato, para evadir impuestos, Dacal habría falseado la suma del alquiler a unos irrisorios 5 mil pesos. Aunque hasta el momento se hizo todo para que este dato no salga a la luz, el miedo del empresario va en aumento. La causa va tomando forma y desde el gobierno de la gobernadora María Eugenia Vidal y el presidente Mauricio Macri saben que tendrán que cortar alguna cabeza si no quieren quedar pegados.