
El informe, realizado por la Universidad de Belgrano, detalló de cara a lo que será un año electoral, una marcada imagen positiva de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires.
Si el año pasado, el 52% creía que iba a cumplir la mayoría de sus objetivos, ahora el porcentaje de personas que apuesta a ello es casi 70%.
Por su parte, la gran mayoría de los ciudadanos cree que Martín Lousteau, Elisa Carrió y Cristina Fernández serán candidatos en las elecciones de 2017.
En tanto, el 59% opina que el peronismo se presentará dividido en las elecciones del año próximo y que el dirigente del PJ más valorado por los encuestados es Sergio Massa, quien cuenta con el 42% de aceptación, por encima de la expresidente Cristina Fernández (25%), del gobernador salteño Juan Manuel Urtubey (12%) y del exministro Florencio Randazzo (10%).
La UCR está condenada a perder ese ámbito de poder que administra cerca de 400 millones de pesos en nombre de la “gobernabilidad” que requiere la administración bonaerense. Vidal decidió ceder a los Esmeralda la titularidad de la Defensoría y allí recalará el ex diputado provincial Guido Lorenzino.
En principio habría dos adjuntos. Uno será para el massismo (Walter Martello) y otro para el Movimiento Evita, acaso otro de los gestos del macrismo en devolución de gentilezas por la decisión de uno de sus líderes, Fernando “Chino” Navarro, de acompañar el Presupuesto.
Los radicales parecen condenados a conservar poco y nada en la Defensoría. Marcelo Honores, su titular interino, busca un lugar bajo el sol. Existen por estas horas gestiones para que los adjuntos sean tres y allí recale el ex intendente de Miramar.
Las encabeza el vicegobernador Daniel Salvador quien, con escasos resultados a la vista, no ha logrado calmar las quejas de su partido ante el “toma todo” que ejercen el PRO y sus acuerdos políticos con el PJ y los massistas.
El malestar radical empieza a trascender las fronteras bonaerenses. Varios popes del centenario partido viajaron el viernes a Jujuy a respaldar al gobernador Gerardo Morales ante los embates que recibe para que la Justicia libere a Milagros Sala y el respaldo light que le estaría dispensando el Gobierno. Allí, se supo, se generó una mini cumbre en la que abundaron duras críticas al funcionamiento de Cambiemos.
Algunos bonaerenses estuvieron en ese cónclave improvisado en el norte argentino. “Si no encontrarmos dónde dialogar sobre políticas públicas como integrantes de la coalición, habrá que pensar en otro esquema de acuerdos hacia adelante”, confió uno de los asistentes a esa reunión con mucho de catarsis.
Los radicales están más que molestos por decisiones políticas que no son consultadas. Las incorporaciones de peronistas al equipo de la Gobernadora siguen generando escozor. Hace algunos meses, como forma de contención política, el PRO armó una mesa provincial de Cambiemos. Allí se convino que cualquier llegada de dirigentes extrapartidarios sería consultada. El intendente de Castelli, Francisco Echarren - otrora muy cercano a Julio De Vido- arribó al gabinete de Vidal. Pero la mesa provincial de Cambiemos sigue cerrada por vacaciones."
Pero hoy por hoy, María Eugenia puede mirarlos a todos desde arriba.