Tomando la experiencia de países como Francia e Israel, este miércoles (31/5) la gobernadora María Eugenia Vidal anunciará que sacará a las calles a 790 policías de la caballería e infantería que serán apostados en puntos calientes del conurbano bonaerense, Mar del Plata y Bahía Blanca en una estrategia de saturación.
Los efectivos que saldrán en grupos de 3 ó 4 a cubrir algunos puntos estratégicos de la provincia han recibido “una capacitación adecuada”. Trabajarán entre las 18 y las 24, el período de mayor flujo de gente en la vía pública y el de mayor riesgo, según las estadísticas criminales.
Los oficiales, que estarán vestidos de fajina (uniformes tipo combate) con armas cortas y largas a la vista, se ubicarán en las esquinas, para que tengan un amplio margen de visión y para que sean vistos desde lejos, de manera que se acentúe el efecto disuasorio de su presencia, precisó Clarín.
La decisión de Vidal implica también un cuestionamiento a las policías locales ya que los efectivos que saldrán a la calle harán las funciones para las que estaban pensadas esas fuerzas: “Dio muy malos resultados el plan de hacer convocatorias municipales”, dijo para cancelar toda posibilidad de que este año se reabra el ingreso de agentes a las policías municipales.
En tanto, también se lanzará la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI), un grupo especial de 160 policías especialmente seleccionados y entrenados durante los últimos cinco meses para que actúen como grupo de acción rápida ante crisis. “Están mejor formados que el promedio y nos permiten tener flexibilidad ante una emergencia delictiva o, como ocurrió en Villa Elisa, una emergencia climática como una inundación”, explicó Vidal.
El objetivo -remarcan- es "reforzar los patrullajes" para brindar "tranquilidad y protección a los vecinos en su vuelta a casa". Se trata de un "modelo de prevención y de cercanía con la población".
Los 800 uniformados de Infantería y 200 de Caballería –es el total de efectivos que saldrán a la calle- realizarán "tareas específicas de prevención y de cercanía con la población".
La UTOI -con sede en el Puente 12, entre La Matanza y Ezeiza- dependerá de manera directa del ministro de Seguridad, lo que -sostienen- permitirá "evitar demoras burocráticas y dar respuesta rápida y efectiva a los requerimientos".
Los agentes son recientes egresados, con 9 meses de entrenamiento, más una formación especial de 5 meses complementarios. En tanto, los cuadros superiores serán ocupados por agentes de unidades especiales, como Halcón, Grupo de Ayuda Departamental, Grupo de Prevención Motorizada e Infantería.