
Tal como como Patricia Bullrich, devenida en ministra de Seguridad de la Nación fue una sorpresa -hasta horas antes parecía o presidente de la Cámara baja o titular del bloque legislativo-, el arribo de Diego Kravetz como ministro de Seguridad de Lanús, convocado por Néstor Grindetti resultó un interrogante. Kravetz, hasta su colisión con los Kirchner, fue jefe del bloque de legisladores porteños del Frente para la Victoria; luego de un breve paso como organizador del Frente Renovador en Ciudad de Buenos Aires, se fue a trabajar en la campaña del ex ministro de Hacienda porteño quien, apenas ganó el comicio en el municipio bonaerense, lo convocó para un tema decisivo en el éxito de la gestión de cualquier alcalde bonaerense: la seguridad pública.
¿Y cómo le estará yendo a un ex legislador porteño (Kravetz en Lanús el caso de Kravetz se asemeja al de Cristian Ritondo a cargo de la seguridad provincial) en Lanús, luego de más de 4 meses de gestión? A priori no es fácil porque los efectivos de la Policía Local parecen escasos, el presupuesto para la seguridad nunca alcanza y menos para el equipamiento, y en la sociedad hay más gente o con tendencias agresivas o con la decisión de delinquir.
Ex porción del Partido de Barracas al Sur, junto a los actuales municipios de Avellaneda, Lomas de Zamora, y las localidades de Adrogué y Barrio San José, el territorio que debe su nombre al terrateniente entrerriano Anacarsis Lanús (1820-1888), tiene localidades con barrios complejos. Es el caso del saladero fundado por Juan Manuel de Rosas en 1815, hoy Monte Chingolo. O, en el otro extremo, el territorio fundado por Restituto Caraza.
Aquí un breve diálogo con Kravetz:
-¿Hay una percepción diferente de la seguridad en Ciudad de Buenos Aires que en el Gran Buenos Aires? ¿Acaso el 1er. cordón de GBA no es una extensión de CABA?
-Es y no es. Convengamos que entre CABA y GBA hay una problemática integrada y común en materia de seguridad. Pero también hay diferencias importantes que afectan cómo se perciben esos problemas y qué respuestas demandan. A grandes rasgos las diferencias son 2:
> la composición social y
> la estructura y funcionamiento de las fuerzas de seguridad.
No es igual la sociedad de Lanús que la de la capital federal, no es igual la distribución de ricos, clase media y gente humilde ni tampoco tienen los mismos niveles de urbanización, por mencionar algunas diferencias. Eso por un lado. Por otro lado, en CABA están la Policía Federal y la Policía Metropolitana, mientras que en Lanús están la Bonaerense y la Policía Local. Son fuerzas completamente distintas, tanto en sí mismas como en su forma de trabajo en conjunto, si bien ahora el nuevo Gobierno Provincial está haciendo reformas que tienden a mejorar los canales de cooperación de estas fuerzas. Pero sí, definitivamente difiere la percepción. Digamos que los problemas son similares, pero no se pueden abordar del mismo modo en CABA y en Lanús.
En el municipio la demanda ciudadana tiene 4 ejes: mayor presencia policial, efectivos mejor formados, más insumos tecnológicos y una justicia veloz y efectiva. Digamos que está es nuestra brújula de gestión en seguridad para terminar con la política de los parches y empezar con la política de las soluciones.
-¿Cómo evalúa la experiencia de la policía local, proyecto antiguo pero, por necesidad, promocionado por Daniel Scioli durante la campaña electoral?
-Muy bien, pero necesita mejoras. Como dije, la presencia policial es un factor clave en el manejo de la seguridad y hay mucha demanda de la ciudadanía de más policías en las calles. Con la policía local se empezó a cubrir esta demanda, con efectivos que están preparados para atender las problemáticas específicas del territorio. En Lanús ahora estamos formando 550 policías nuevos, que se van a sumar a los 216 que ya existen. Más policías, esa es la 1ra. de las 4 patas de nuestro Plan de Seguridad. La 2da. es mejorar la formación de estos policías. Si bien la policía local representó una mejora, hasta ahora tiene una formación bastante limitada. Nosotros estamos profundizando esa formación y la subimos de sus 4 meses originales a 9 meses. También estamos ofreciendo capacitaciones diversas para los 216 efectivos que ya están en funciones.
La policía local es un buen comienzo para cubrir una función que es la de la policía de cercanía. Acá en Argentina lamentablemente estamos llegando un poco tarde a este tipo de fuerza de seguridad. Países como Brasil o Colombia, dentro de la región, o ciudades como Barcelona, han dado ejemplos de lo ventajoso de estas fuerzas para la pacificación. Por “pacificación” me refiero no solo a combatir el delito, sino a trabajar en las zonas que son focos de delito para que dejen de serlo, devolver la presencia estatal a territorios que son controlados por los delincuentes. A eso apuntamos a largo plazo con la policía local, en coordinación con la Policía Bonaerense, claro.
-¿Es posible establecer una sinergia entre la policía provincia y la local? ¿En qué condiciones?
-La Policía Local es un cuerpo de la Policía Bonaerense, es decir, está contemplada desde su concepción como una fuerza que actúa en coordinación con la policía provincial. Las reformas que impulsó recientemente la gobernadora Vidal junto con el ministro de Seguridad, Ritondo, ayudan a agilizar la comunicación y colaboración dentro de las fuerzas policiales, o sea que estamos por ver un funcionamiento más integrado de la Policía Local y la Bonaerense.
-¿Hay alguna forma de organización barrial adecuada que incremente la seguridad en cooperación con la policía local?
-Primero que nada, la seguridad no es delegable. Fomentar la participación está bien porque afianza los lazos comunitarios entre vecinos. Es lógico, si vos colaborás para hacer que tu barrio sea seguro, y tu vecino te ve, te conoce, se acuerda de vos, y pasa igual con varios vecinos, esto genera familiaridad, confianza, todas cosas que son valiosas e imprescindibles para combatir la inseguridad. Pero le corresponde al Estado proveer los canales de participación, los medios y la planificación. El responsable de la seguridad es el Estado.
La intendencia de Lanús está implementando algunos programas en esa tónica, como Senderos Seguros, que tiene precedentes muy alentadores en la Ciudad de Buenos Aires. Por ahora empezamos con las escuelas, pero pensamos expandirlo muy pronto a las salidas nocturnas de los adolescentes, que están muy expuestos al delito así como a los jubilados en sus días de cobro. Son programas que fomentan la participación y la familiaridad entre vecino
-¿Tiene previsto establecer un sistema de emergencias 911 local?
-Sí. Nosotros vamos a un centro único de atención para las emergencias de seguridad, salud y defensa civil. Para ello hace falta tener un número municipal de atención ante la emergencia de seguridad, por ejemplo el 500.
El 911 pasaría de este modo a ser uno de los dos números telefónicos. La diferencia sería que cuando llamas al 911 te atiende un operador en La Plata y nos lo deriva, y el 500 directamente lo atendemos nosotros.
-¿Es apropiado que la policía local desarrolle tareas de inteligencia criminal en función de un mapa del delito del municipio?
-Es importante que el jefe de la policia local, el jefe departamental, el jefe distrital y la secretaria de seguridad del municipio tengan un ámbito de análisis de las contingencias que se va sucediendo, de las estadísticas y que se vaya actualizando el mapa del delito. Esto permite el desarrollo de políticas públicas acorde a una realidad que es muy dinámica en materia delictual.
-¿Es apropiado incorporar alguna tasa impositiva local para asegurar un adecuado financiamiento de la policía local?
-En principio la Policía Local tiene su financiamiento, que es aportado por la Provincia. Sí, es cierto que el problema de la seguridad ha escalado tanto que algunos municipios hacen aportes de sus arcas para el equipamiento de la Fuerza.
Nosotros hemos invertido en el armado y construcción de la Escuela de Policía Local, en nuevos formadores para los aspirantes y para los agentes, en equipamiento y hasta en el alquiler y puesta en valor de la sede central de la misma.
-Considerando la creciente sofisticación y poder financiero de las redes delnarcotráfico¿qué puede hacer una policía local al respecto?
-La Policía Local no tiene competencias para ello. Corresponde a Inteligencia Criminal.
El lugar de la policía local es el barrio, la realidad cotidiana y tangible del vecino, las calles por las que transita a diario y los problemas de siempre.
-Además de la policía local ¿cuáles otras herramientas tiene para asegurar la seguridad en su territorio?
-Obviamente la presencia de la policia bonaerense y dentro de poco, la federal.
Desde el area municipal acompañamos con la Patrulla de Proteccion Ciudadana, por un lado.
Y por el otro, estamos haciendo una inversión fuerte en tecnología, especialmente aumentando la cantidad de cámaras y centros de monitoreo. Esto nos permite no solo supervisar y controlar las calles sino al propio accionar policial.
La tecnología es la tercera pata de nuestro Plan de Seguridad. Ahora estamos por sumar más de 250 cámaras nuevas a las 187 que ya tenemos, lo cual nos da una cobertura muy amplia de todo lo que pasa en el municipio. También tendremos dos centros más de monitoreo y vamos a sacar un servicio de botón antipánico para celulares, lo cual hace que cada teléfono móvil funcione como un botón antipánico.
Nuestro ideal es tener un Estado omnisciente del delito. Suena utópico, pero vamos hacia allá, vamos hacia un Estado con mayor registro de lo que le pasa a sus ciudadanos y con una mejor capacidad de repuesta, claro.