Meses atrás, Miguel Saredi lanzó el espacio Nueva Dirigencia en La Matanza, para posicionarse de cara al 2019 en el distrito clave de la provincia de Buenos Aires que Cambiemos quiere arrebatarle al kirchnerismo, que gobierna con Verónica Magario. Pero Saredi no logra mejorar en las encuestas y el ajuste y la situación económica no lo ayudan.
Desde la Gobernación bonaerense se pensó entonces en instalar al actual ministro de Educación nacional, Alejandro Finocchiaro. Por entonces ocupaba la misma cartera pero en Provincia. Incluso hubo afiches en las calles de La Matanza anunciando su candidatura para el año que viene. Pero la cuestión docente y algunos escándalos (una mujer denunció que había sido violada por él en su juventud) empañaron sus aspiraciones y no logró despegar en las encuestas.
Hubo otras alternativas que tampoco tuvieron éxito como la postulación del senador Esteban Bullrich. También se pensó en su compañera de bancada Gladys González, pero la mujer ya se decidió a buscar la Intendencia de Avellaneda. Y otro que se descartó fue el ‘lilito’ Héctor ‘Toty’ Flores que nunca tuvo buenos números en ese distrito.
Sin muchas más cartas que jugar en La Matanza, Cambiemos volvería a la idea de postular al ministro de Seguridad Cristian Ritondo. Habría existido una encuesta realizada en los últimos días en el distrito que le habría dado buenos porcentajes al funcionario, lo que habría sido bien recibido en la gobernación de María Eugenia Vidal.
En el entorno de la gobernadora aseguran que Ritondo tiene un alto nivel de conocimiento y de imagen positiva.
Según trascendió, la encuesta le dio a Ritondo 30% de intención de voto siendo la figura política mejor posicionada después de Magario que sigue primera y lejos.
Fue el pleito con Magario por temas de Seguridad lo que le hizo a Ritondo subir en conocimiento e intención de voto. Además, el alto perfil de su gestión en el ministerio lo mantiene en los medios de comunicación. Recientemente el caso ‘Pity’ Álvarez y la presentación de vehículos incautados a los narcos para uso policial, realzaron su figura.
El problema para Vidal es cómo convencer a Cristian de arriesgarse a competir en el territorio que muy bien maneja el ahora diputado y exintendente Fernando Espinoza (gracias a su aceitado mecanismo político dejó como intendenta a Magario), cuando Ritondo lo que pretende en verdad es una jugada más segura como vice de la gobernadora cuando ella busque su reelección.